Una ardua investigación llevada por un equipo experto en Doramalandia ha realizado un increíble descubrimiento. En efecto, tal y como todos sospechábamos tras ver numerosos doramas, los motoristas en Corea reciben un entrenamiento especial y muy riguroso sobre cómo unir parejas indecisas. Y es que al parecer lo de ligar no lo llevan bien por esos lares y los tortolitos que no se animan a dar el primer paso necesitan de un empujoncito para saltar a brazos del otro.
El modus operandi es el siguiente. El morotorista, trabajador y entregado a su patria, debe de estar ojo avizor en todo momento cuando está en carretera atento a cualquiera pareja con indicios de timidez extrema. Para reconocer estos pequeños signos los motociclistas son sometidos a una ardua instrucción ya que cualquier pequeño error de cálculo podría ser fatal.
Una vez ha detectado la pareja el motociclista fija su objetivo en la chica y acelera dispuesto a arrollarla. Entonces el hombre indeciso que la acompaña actúa por instinto primitivo y salta a salvarla acabando la una en brazos del otro y con el corazón a mil. Nada como una situación de riesgo para que se le suba a uno la adrenalina y se le desboque el corazón. Cuando se miran a los ojos lo descubren. Sí, ahí está el amor.
Entre tanto el motorista desaparece como un ángel de la muerte satisfecho tras haber prestado un inestimable servicio a la comunidad.
Por supuesto este método tiene sus riesgos. ¿Qué ocurriría si el hombre en cuestión no actúa por instinto y la chica es atropellada? Pues sabrá que ese tipo no vale la pena y podrá pasar página sin más preámbulos (si sobrevive al accidente, claro).
Como veis aunque puede no parecer gran cosa es un servicio comunitario de vital importancia para la supervivencia del romance coreano. Seguro que se os vienen a la cabeza muchas grandes parejas que comenzaron su épico romance tras ser rescatados de las garras de la duda por un peligroso motorista. A mí se me ocurren dos que he visto recientemente: "Ojakgyo Brothers" y "K-pop the Ultimate Audition" pero seguro que vosotros podéis aportar mucho más ejemplos. Y es que en Corea San Valentín ha cambiado las alas blancas por una moto y las flechas por un acelerón. Lo demás está en manos del amor.
Os dejo evidencia gráfica irrefutable que nos ayudará a comprender dicha compleja técnica. ¡Qué lo disfrutéis!
Jajaja me encanta la vida según los doramas xD ojala puedas seguir :)
ResponderEliminarGracias ^^ Tengo otras pensadas pero necesito tiempo
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