Acabo de terminar el 2º episodio de "Me too, Flower" y como prometí aquí va un poco más de mi impresión. ¿Qué nos ofrece este nuevo capítulo?
La peculiar personalidad de los protagonistas da pie a escenas tan ridículas como divertidas; pero también nos empieza a hacer participe la profundidad de sus emociones, traumas y problemas personales. Ellos son precisamente con su particular forma de actuar los que le dan un toque original a la serie que parece centrarse en la complejidad de los corazones humanos.
Por un lado, una mujer descontenta con su vida, con drásticos cambios de humor que oscilan de la apatía al enfado, de pronto A la aparente (no verdadera) alegría y después al punto álgido de su agresividad. Supongo que a medida que avance la trama iremos deshilando el pasado que la llevó a este estado semidepresivo; pero echando un vistazo al día a día, a como intenta vivir de forma honesta y como todos pasan sobre ella, unida a su soledad y una ruptura dolorosa... ya me puedo hacer una idea de porqué es como es. Una mujer con carácter y fuertes principios, pero que por desgracia pierde con facilidad los estribos y es que peor que odiar tu propia vida es odiarte a ti mismo. Creo que es un personaje al que llegaré a tener mucho cariño.
Por otro lado, el protagonista masculino, un hombre joven y atractivo (al estilo lindo) que vive la vida a su manera y cuya forma de pensar es cuanto menos difícil de comprender. ¿Pero quÉ se puede esperar de un rico CEO, talentoso en el mundo de la moda, que finge ser un aparcacoches en su propia empresa? Cuanto menos excéntrico... A través de breves flashback podemos adivinar que su vida no ha sido en absoluto sencilla, pero tendremos que esperar todavía un rato hasta conocer los pormenores de su triste historia. Lo que es seguro es que es un chico con muchas cicatrices y que aunque por su actitud parece que vive la vida sin que nada le importe, divirtiéndose a costa del mundo, en realidad no es difícil darse cuenta de que realmente se preocupa.
En cuanto a los personajes secundarios, tenemos a una mujer estilo femme fatale, de esas hermosas y de éxito, secretamente enamorada de nuestro despistado prota y que no podrá evitar sentirse celosa de su cercanía con la mujer policía (por supuesto, no podía faltar).
Una tercera mujer se une a la salsa, obsesionada con la moda, con encontrar un buen marido y medio neurótica que vive la vida a base de mentiras y seguramente se me hará insoportable (lo siento, no puedo con este tipo de personajes).
Pero, chicas no desfallezcáis, que tenemos otro chico guapo para alegrarnos la vista. Se trata de un joven agente de policía recién salido del horno (la Academia) y directo a comérnoslo con los ojos. Sí, es ese adorable e inocente niño de cara bonita que obviamente no tendrá ninguna posibilidad con la protagonista y cuya personalidad simple dará un toque divertido a la historia.
Un segundo episodio que me ha acercado más a la protagonista y sus emociones y que ha logrado hacerme reír, pero me ha hecho acabar llorando (¡y queriendo ver más!). Pero nada, habrá que esperar al próximo episodio.
No me gustan los tríos ¡pero esto es ya un cuarteto! |
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